Civilizaciones antiguas y su relación con los astros

Desde tiempos inmemoriales, las civilizaciones antiguas han mirado hacia el cielo con asombro y reverencia. Los vastos alcances del universo y los cuerpos celestes que lo pueblan han sido una fuente constante de inspiración, miedos, y el escenario en el que se han proyectado mitos y leyendas. Este artículo explorará cómo estas civilizaciones antiguas interactuaron con los astros, y cuál fue el significado de esta relación. A través de observationes meticulosas y el desarrollo de sistemas sofisticados, nuestros ancestros buscaron entender el cosmos y su impacto en la vida diaria.

La observación de los astros en la antigüedad

La observation de los astros ha sido una práctica central de las civilizaciones antiguas. Estos pueblos no solo veían en el cielo indicios para la navegación o la agricultura, sino que también buscaban en los astros respuestas a grandes preguntas existenciales y espirituales.

Por ejemplo, los Babilonios eran expertos en seguir los movimientos de los planetas y las estrellas. Crearon mapas estelares detallados y establecieron un calendario que ha influenciado los sistemas de tiempo hasta hoy. Esta civilización antigua empleaba también la astrología, creyendo que los astros influían directamente en los sucesos terrenales.

En los Andes, el pueblo Inca alineó cuidadosamente sus ciudades, templos y líneas misteriosas llamadas Nazca con eventos celestiales importantes como solsticios y equinoccios. Ellos veían el cielo como un reino divino que reflejaba su orden social y su cosmovisión.

Astronomía y astrología en las civilizaciones antiguas

Para las civilizaciones antiguas, la astronomía y la astrología eran partes de una misma ciencia que buscaba comprender no solo la mecánica del cielo, sino su influencia en los asuntos humanos.

Los Mayas, conocidos por su avanzada comprensión astronómica, desarrollaron uno de los calendarios más precisos de las civilizaciones antiguas. El Tzolk’in, su calendario sagrado, se basaba en un ciclo de 260 días que se relacionaba íntimamente con la posición de los astros y la astrología. Ellos creían que los dioses se comunicaban mediante los astros y que estos influían en el destino de la gente.

En el antiguo Egipto, la astronomía era esencial para la ordenación de la sociedad. Los egipcios se orientaban por la estrella Sirio para predecir las inundaciones del Nilo, que eran cruciales para la agricultura. Además, integraron la posicion de las estrellas en la construcción de las pirámides, alineándolas con precisión espantosa hacia ciertos puntos estelares.

Civilizaciones antiguas y la construcción de megalitos

Los megalitos, grandes estructuras de piedra erigidas por civilizaciones antiguas, están a menudo asociados con la astronomía. Estas construcciones monumentales fueron diseñadas, en muchos casos, para alinearse con eventos astronómicos específicos.

Stonehenge, en Gran Bretaña, es quizás el ejemplo más famoso. Las piedras están dispuestas de tal manera que, durante el solsticio de verano, el sol se levanta en perfecta alineación con el Heel Stone. Esta civilización antigua demostró un impresionante conocimiento de la mecánica del cielo y la capacidad para marcar estos eventos año tras año.

En la cultura megalítica de Malta, también encontramos estructuras alineadas con solsticios y equinoccios, demostrando así el conocimiento y la importancia que le daban los constructores a la relación con los astros.

Mitología y leyendas celestiales

La mitología es un reflejo de cómo las civilizaciones antiguas interpretaban y daban sentido al cielo que veían encima de ellos. Casi todas las culturas tienen mitos que explican las estrellas, los planetas, y los fenómenos como eclipses y cometas.

Los Griegos desarrollaron un panteón de dioses donde cada uno estaba asociado con un cuerpo celestial. Zeus reinaba desde el Monte Olimpo, pero también era el dios del rayo y se le asociaba con el planeta Júpiter.

La civilización Nórdica veía el cielo nocturno como el lienzo sobre el cual se narraba la batalla entre los dioses y los gigantes, y donde cada constelación tenía su propia historia.

Los astros como guías cotidianas

Las civilizaciones antiguas no solo miraban los astros por razones espirituales o de conocimiento. Los astros eran guías prácticas para la vida diaria.

Los marineros fenicios, por ejemplo, navegaban el Mediterráneo usando las estrellas para orientarse. Sabían que al seguir la estrella Polaris, podían mantener un curso hacia el norte.

Los agricultores de muchas culturas usaban un calendario basado en los ciclos lunares para saber cuándo sembrar y cuándo cosechar. Este conocimiento era esencial para la supervivencia y prosperidad de las civilizaciones antiguas.

Conclusiones: Los astros y su legado

La relación entre las civilizaciones antiguas y los astros es un reflejo de la curiosidad y la capacidad de asombro que caracterizan a la humanidad. Con cada observación y cada monumento construido, nuestros ancestros nos dejaron pistas de su búsqueda de entender el cosmos y encontrar nuestro lugar dentro de él.

Como se ve a través de estas civilizaciones antiguas, los astros no eran solo puntos de luz en el cielo, sino componentes esenciales de sus cosmologías, su vida cotidiana y su permanente legado en el tiempo. Hoy seguimos maravillándonos con el cielo, y es en parte gracias a estas antiguas civilizaciones que empezamos a descifrar sus secretos.

Artículo publicado el 31 Dec 2023