Luna llena del Observatorio, copyright - Yuri Beletsky -
El conocido "Full Wolf Moon" es el nombre que recibe la primera luna llena de enero en el hemisferio norte, una denominación que evoca imágenes de lobos aullando en las frías noches de invierno. Este evento celestial tiene también un especial protagonismo al emerger sobre el Observatorio Las Campanas, situado en el dramático paisaje terrestre y lunar del Desierto de Atacama en Chile. A través de la mirada de los ojos astronómicos que son los telescopios Magellan, gemelos de 6.5 metros de diámetro, se ha capturado esta impresionante imagen con un objetivo telefoto, tomando la escena desde una distancia aproximada de 9 millas del observatorio, mientras que la luna se encontraba a unos 240,000 millas de la superficie terrestre.
No menos importante es el primer plenilunio del año lunar nuevo, a menudo conocido como el "Full Snow Moon", que hará su aparición el 24 de febrero. Esta es una excelente oportunidad para los aficionados a la astronomía y para el público en general de presenciar un espectáculo lumínico en el firmamento invernal.
En la astrofotografía, capturar la belleza del cielo nocturno junto con el terreno terrestre requiere no solo de equipo especializado, sino también de una planificación meticulosa y un entendimiento profundo de los fenómenos celestes. El Desierto de Atacama, además de ser uno de los lugares más áridos del mundo, es conocido entre los astrónomos por su cielo extremadamente claro y su mínima contaminación lumínica, lo cual lo convierte en un sitio ideal para la observación astronómica.
Los telescopios Magellan, con sus espejos de gran tamaño y avanzada tecnología, son herramientas esenciales en la investigación astronómica moderna. Contribuyen significativamente a nuestra comprensión del universo, facilitando el estudio de objetos distantes como galaxias, nebulosas y otros cuerpos celestes.
El atractivo que ejerce la luna sobre nosotros no ha mermado con el tiempo y continúa inspirando tanto a científicos como a soñadores, marcando un ritmo que, desde tiempos ancestrales, ha dictado semillas de mitos y leyendas, mientras que en la actualidad dicta ciclos de estudio y exploración.
Es importante recordar que nombres como "Full Wolf Moon" y "Full Snow Moon" provienen de las tradiciones de las tribus nativas americanas y de los primeros colonos europeos que utilizaban estos nombres para llevar registro de las estaciones. Hoy en día, continúan siendo parte de nuestra cultura popular y son usados comúnmente por medios de comunicación y entusiastas del firmamento para referirse a estos eventos de luna llena.
Artículo actualizado el domingo, 28 de enero de 2024
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